El DSM siempre ha sido mucho más que un lugar de trabajo para mí. Las muchas personas queridas (niños, padres, colegas, etc.) que pude conocer y los numerosos momentos inolvidables que guardaré como tesoros en mi corazón. Siempre estaré conectada con el DSM y estoy segura de que te veré allí de nuevo algún día. Fueron 12 años maravillosos y no hubo un día en que no esperara con ansias iral colegio cuando me levanté.